sábado, 28 de noviembre de 2015

La Esclavitud Mediante Contrato


Estamos atrapados en una forma inimaginable de "magia negra". No solo en el sentido literal de dicho sustantivo ("arte o ciencia oculta con que se pretende producir, valiéndose de ciertos actos o palabras, o con la intervención de seres imaginables, resultados contrarios a las leyes naturales", diccionario de la R.A.E., 23ª edición), sino en el negro sobre blanco de los impresos burocráticos que constituyen una cárcel de tinta infinitamente más eficaz que la de hierro y hormigón... porque a ésta somos conducidos a la fuerza, mientras que en aquélla entramos por nuestra propia voluntad.


Los controladores de este mundo han urdido el mayor de los engaños (ver enlace), manipulando a la mayoría de las personas hasta hacerlas renunciar a sus derechos naturales sin siquiera violar un "libre albedrío" que es sagrado en el más literal de los significados.

La herramienta básica de esta magia es la manipulación del lenguaje (ver enlace), una manipulación de la que la inmensa mayoría de la humanidad no es consciente y que vamos a analizar con detenimiento. Porque el lenguaje, sencillamente, programa nuestra mente, y define la caverna platónica en que habitamos. Es decir, la única realidad que nos resulta admisible. Ignoramos por completo qué escapatoria existe.

Nadie nos dijo que teníamos una alternativa al sometimiento, por lo que la información que comparto a continuación es de obligada lectura para todo el que aspire a una libertad que las reglas del juego en que participamos hacen imposible. 


Comencemos por lo que otorga toda su eficacia a la cárcel de papel que nos asfixia: el permiso que otorgamos para nuestra propia esclavitud, el CON-SENTIMIENTO. Nótese en seguida que el prefijo "con" indica siempre algo negativo, una pérdida, restricción o negación. 

"Pro" es positivo y "con" es negativo. Así, las palabras: "pros" y "contras". 

Dos de las palabras más incomprendidas que existen en todo nuestro "mundo" son:
  • contrato
  • consentimiento

Son palabras incomprendidas porque no quieren decir en modo alguno lo que pensamos que significan, y son utilizadas de una manera que la mayoría apenas puede comprender. 


De hecho, los conceptos que describen las palabras son las principales líneas del "sistema operativo", las dos mayores ESTAFAS de nuestro mundo (en realidad, de un mundo que ya no podemos llamar "nuestro").

La razón por las que a las personas que han alcanzado el estado de iluminación no les gusta usar "contratos" cuando interactúan con otros es que los contratos son a sus ojos (ojos para los que Maya, la Ilusión, no tiene ya ningún poder)... ¡Hechizos de Magia! (para entender el sentido en que debemos entender aquí el término "magia" remito al lector a esta entrada). 


Como he señalado antes, el prefijo "con" define una negativa. 

Por lo tanto, un contrato, es una manera negativa de imponer restricciones y un "límite" a las opciones y elecciones de otros seres humanos vivos, reduciendo la eficacia de su libre voluntad, y luego de forma "sobrenatural" VINCULARLOS a ese límite, al conseguir una firma del ellos, ¡que es la "marca" de su consentimiento para ese vínculo sobrenatural! 

Permítanme repetir esto:

Una firma (sello) es la "marca" de su consentimiento para un acuerdo sobrenatural! 

Su firma es la "marca de la bestia" bíblica, porque encarcela y esclaviza a la persona que la usa de una manera que no entienden. 

Signet (sello) 

Sustantivo:
  • 1.- un pequeño sello, como en un anillo de dedo.
  • 2.- un pequeño sello oficial depara documentos legales, contratos, etc.
  • 3.- una estampación hecha con o como un sello.

La mayoría de los hechizos mágicos funcionan en niveles que son "no-físicos"


Los hombres y mujeres que están operando entre bastidores detrás del escenario mundial son en verdad Magos Negros practicando Magia Secreta

Algunos los llaman el CABAL, y otros los llaman los Illuminati. Cualquiera que sea su denominación, ellos están muy bien entrenados en estos asuntos y saben mucho de este tipo de conocimiento esotérico, que se enseña en las escuelas de misterios como una forma de magia negra. 

El único verdadero propósito de un contrato -el propósito oculto- es limitar y obligar a la persona a entrar en él. Los contratos son herramientas oscuras debido a que su principal objetivo, además de limitar y vincular es eliminar la LIBRE VOLUNTAD, que es el don sagrado con que cada uno de nosotros ha venido a este mundo. 


El libre albedrío es un poder extraordinario que nadie nos puede arrebatar... a no ser que renunciemos a él. El libre albedrío es el extremo de un sutil lazo que nos conecta con el ser espiritual. Las leyendas y mitos que hablan de vender el alma al diablo simbolizan en realidad la cesión de ese don a los poderes oscuros. La gente está vendiendo su más preciada posesión continuamente, aceptando baratijas a cambio del don más preciado que tenemos. 

Pensemos en todos los hombres y mujeres que hacen cola para unirse por "contrato" al ejército, donde entregan, con su libre "consentimiento", su derecho a tomar decisiones por sí mismos. 

Con el LIBRE ALBEDRÍO anulado, se les puede "ordenar" que vayan a la batalla, e incluso a su muerte física. ¡Guauu! - esa alma acaba de perderlo todo, incluso lo que era un regalo más precioso, la vida misma. 

Así pues, aquellos seres humanos que firman contratos, entran en un hechizo de magia negra que anula su propia voluntad. 


Ni el propio Creador puede castigar a los que lanzaron el hechizo, o salvar a quien lo suscribió, porque su libre albedrío no le fue arrebatado: usted eligió entregarlo, sin duda engañado, pero eso es otro tema a discutir un poco más tarde (tampoco la ignorancia de la Ley Cósmica nos exime de su cumplimiento). Lo más importante para saber en este momento es que mediante la firma de cualquier contrato, usted da su consentimiento para ser atado por arte de magia de una manera que nunca imaginó. 

Vamos a investigar cómo funciona esto. 

En todo contrato se manifiesta una palabra mágica, cuyo poder simbólico impide a los seres de ir en contra de lo que acordaron cuando entraron en el hechizo/contrato.

¿Cuántos de nosotros nos damos cuenta de la geometría sagrada de nuestro alfabeto? 

¿Cuántos de nosotros entendemos que la colocación de ciertas palabras y frases en un orden específico hace que la geometría sagrada se produzca?


Piense en la fórmula bajo la cual se le comunican sus derechos a un detenido: Do you under-stand? ("¿Comprende usted?"). En realidad, las dos últimas palabras han cambiado su lugar respecto a lo que se le está diciendo a la persona, que es: Do you stand-under? ("¿Se subordina/somete usted?"). Asentir a dicha fórmula mágica implica que uno acepta el contrato verbal que, subrepticiamente, se le está proponiendo. A partir de ese momento ha renunciado a su propia soberanía para caer bajo los arcanos de un sistema para él incomprensible. Un sistema que le anula como sujeto libre, en el que sus derechos inalienables son ya solo meras con-cesiones que -CONdescendientemente, como cesión que le minimiza, le hace "descender" de su dignidad de humano- le otorga el Sistema.

Solo un Mago Negro Oculto se daría cuenta del truco. Pero no es más que un ejemplo de los resortes que las élites situadas en la parte superior de la Estructura de Control del Mundo utilizan contra nosotros.

Hay muchas maneras de describir este fenómeno, pero los que lo usan, lo llaman "palabra mágica", o "balbuceo" (babel de la antigua Babilonia) y los abogados que apoyan la magia negra "sobrenatural" de los contratos, trabajando con ellos, simplemente lo llaman "jerga legal".


Es muy dudoso que ningún abogado pueda afirmar que "en el fondo" ignora que está pasando aquí. Escriben contratos y negocian con ellos diariamente.

Ellos conocen las palabras específicas a usar porque se les ha enseñado a escribir contratos y hacerlos eficaces. Saben qué palabras especiales llevan significados dobles y hasta triples, y que la disposición de las palabras puede resultar engañosa, que es la razón por la que las utilizan. 

Ahora, SI la intención del contrato no era para vincular, limitar y reducir al firmante a no tener otras opciones, ¿qué sentido tiene “I’ve got an Iron clad contract with him” (tengo un contrato férreo)? Piense en ello. En castellano existe la expresión "estar vinculado mediante contrato". La idea de vínculo es de por sí enormemente gráfica: "vínculo" deriva del latín "vincoli", cadena. Quien está sujeto a un contrato en realidad lo que se halla es encadenado.

La mayoría de los abogados saben en su fuero interno que ciertas personas se verán perjudicadas al suscribir el contrato que han diseñado, pero, lamentablemente, asumen que todo esto es normal (a ellos les han dicho que es normal en la Facultad de Derecho). No se detienen a pensar que tal vez están participando en magia oscura, y ayudando a los magos a realizar hechizos mágicos que atan el LIBRE ALBEDRÍO de otros. Como la mayoría de los abogados está a muchos pasos de distancia de los mejores magos del mundo, ellos realmente no entienden que herramientas como la "jerga legal" obedecen a un propósito mucho más oscuro de lo que creen. Simplemente dejan su conciencia al margen de su trabajo, porque el dinero que se les paga para ayudar en la realización de hechizos mágicos es muy tentador (ahora entiende por qué a los abogados se les paga tan bien). 


Bien. ¿De dónde podría haber venido algo tan maquiavélico como la magia de los contratos, y la entrega del consentimiento? De muy atrás en la historia, de un tiempo del que nadie se acuerda. Una época en que los seres humanos vivían libremente antes de la caída y de la gran ESTAFA que se ha adueñado de la Tierra.

De ello hablaremos en breve.

(posesodegerasa, con información reproducida textualmente de:  http://www.bibliotecapleyades.net/)



No hay comentarios:

Publicar un comentario